La vida se desarrolla con normalidad...

LA VIDA SE DESARROLLA CON NORMALIDAD BAJO CIERTAS CIRCUNSTANCIAS PROPICIAS

De allí una de las categorías fundamentales de la dialéctica materialista NEGACIÓN DE LA NEGACIÓN.

Afirma Engels, Federico (1979, pp.104, 105) ANTIDUHRING. Tomemos por ejemplo, un grano de cebada. Billones de granos de cebada se muelen, se cuecen y luego se consumen. Pero en circunstancias normales y propicias, ese grano, plantado en tierra conveniente, bajo la influencia del calor y de la humedad, experimenta una transformación específica: germina; el grano, se extingue, ES NEGADO, y en su lugar brota la planta, que nace de él, la negación del grano. Y se pregunta a la vez ¿cuál es la marcha normal de la vida de esa planta?, se responde. La planta crece, florece, se fecunda y produce, por último nuevos granos de cebada y, tan pronto como estas maduran, muere la espiga, se niega a su vez (…) por ahora nos interesa demostrar que la negación de la negación es un fenómeno que se da realmente en los dos mundos del reino orgánico. Además toda geología no es más que una serie de desmoronamientos sucesivos de formaciones rocosas antiguas y sedimentaciones de formaciones nuevas.

Entonces es sólo cuestión de entrar en razón y entender que nada es eterno, todo cambia, todo fluye en nuestras vidas, particularmente en tierras y emociones con calor humano; por tanto necesitamos momentos circunstanciales de forma y fondo. Podemos constatar este fenómeno al intentar reconstruir nuestro árbol genealógico, por ejemplo, es casi imposible saber el segundo nombre y apellido materno de nuestros tatarabuelos, bisabuelos.

Epistemológicamente, buscar la felicidad a su manera y no estar atados por el cordón umbilical, cosa que siempre confundimos en nuestra cotidianidad.